Lectura: Eclesiastés 11:9-10 "9Alégrate, joven, en tu juventud, y tome placer tu corazón en los días de tu adolescencia; y anda en los caminos de tu corazón y en la vista de tus ojos; pero sabe, que sobre todas estas cosas te juzgará Dios. 10Quita, pues, de tu corazón el enojo, y aparta de tu carne el mal; porque la adolescencia y la juventud son vanidad"
Meditación: Los jóvenes de nuestros días vivimos envueltos en un ambiente que nos incita casi en cada momento a pecar, haciéndonos creer que todo es bueno y está bien si no hacemos daño a los demás, nos enseña que la vida son dos días y hay que disfrutarla al máximo y dejarnos de vivir esclavizados de una religión que ha sido inventada para controlarnos y manipularnos.
Este es uno de los mayores engaños satánicos de la historia de la humanidad. No seamos necios, llegará el día en que tengamos que dar cuentas de lo que hemos hecho, de cómo hemos vivido y a quién hemos dedicado nuestras vidas.
Examínate delante de Dios y purifica de la inmundicia del mundo tu vida. Vive para agradar al Señor. Esto no es religión, es el propósito para el que fuiste creado. Dios quiere verte feliz, libre de la esclavitud del pecado y viviendo bajo su cuidado y protección.
Oración: "Señor, gracias porque un día más podemos respirar y tener un lugar a donde ir, alimento para comer y tu amor que nos llena, protégenos de pecar contra ti, ayúdanos con tu poder a no volver nuestra mirada atrás, que no seamos esclavos de nuevo, te confesamos nuestros pecados arrepentidos y queremos hoy vivir vidas que te agraden y te glorifiquen, te amamos Dios. En el nombre de Jesucristo. Amén"